El profeta de hip hop islámico
KIARASH ALIMI, RAPPER MUSULMAN
El profeta del hip hop islámico
NOTA: Este articulo no refleja la opinión de nuestro sitio, me lo han enviado por mail y lo publico porque aporta a la creación de una idea general de este fenómeno cultural
Tanto escuchar que el país del futuro es China, nos olvidamos de Irán. Anoten: en breve, serán los felices (¿peligrosos?) dueños de una bomba atómica y además tendrán a su selección nacional de fútbol participando del Mundial de Alemania. Y encima... ¡tienen su propia estrella de hip-hop!
El deseo del presidente Mahmoud Ahmadinejad es purgar a la cultura iraní de la influencia anti-islámica de la "música occidental decadente" y, para ello, necesita a todos los aliados que pueda conseguir. Pero ahora cuenta con el apoyo insólito e inesperado de Kiarash Alimi, un músico adolescente iraní que recurrió al rap para persuadir a sus compatriotas jóvenes de que sus gustos son equivocados.
Ahmadinejad respondió a la disolución de la cultura revolucionaria islámica alguna vez floreciente en Irán prohibiendo canciones de estrellas como George Michael y Eric Clapton en la televisión y la radio estatal. La prohibición afectará a millones de jóvenes iraníes, que siguen ávidamente el progreso de la música occidental.
Alimi, de 19 años, es uno de los artistas más prominentes de Irán y decidió respaldar al presidente ultraconservador de su país atacando el "bombardeo cultural" de Occidente y contraatacando al enemigo a través de uno de sus sonidos más subversivos: el rap.
En su álbum The Guy From Shahrak-e Gharb (El tipo de Shahrak-e Gharb), en referencia a un barrio adinerado del norte de Teherán, ridiculiza a los jóvenes iraníes ricos que esconden su identidad nacional detrás de una fachada de básquet, remeras del Che Guevara y un dialecto callejero basado en el slang típico de los suburbios pobres de Estados Unidos. Con una buena dosis de ironía, la canción hace referencia a la influencia del rapero norteamericano Eminem, que también es un gran éxito en Irán y al que pretende emular, pero en el sentido contrario de su discurso.
"Occidente puede imponernos muchas influencias culturales porque tiene los medios más poderosos del mundo", dice Alimi. "Pero nosotros no podemos exportar nuestra cultura a Estados Unidos, aunque Irán tenga una historia y una cultura que es mucho más antigua. Somos víctimas de un bombardeo cultural".
Con letras que no escatiman desprecio por las pretensiones pseudo-norteamericanas ni insultos, el álbum probablemente no sea lo que Ahmadinejad tenía en mente cuando hizo que el Consejo Revolucionario Cultural Supremo le ordenara a las emisoras regresar a la "música clásica y refinada de Irán".
Este decreto provocó consternación entre muchos músicos que temen un retorno a los días austeros de la revolución islámica cuando prácticamente toda la música estaba prohibida. Pero Alimi dice: "Si el blanco de Ah madinejad es la invasión de una forma de decadencia cultural, tenemos el mismo objetivo".
KIARASH ALIMI, RAPPER MUSULMAN
El profeta del hip hop islámico
NOTA: Este articulo no refleja la opinión de nuestro sitio, me lo han enviado por mail y lo publico porque aporta a la creación de una idea general de este fenómeno cultural
Tanto escuchar que el país del futuro es China, nos olvidamos de Irán. Anoten: en breve, serán los felices (¿peligrosos?) dueños de una bomba atómica y además tendrán a su selección nacional de fútbol participando del Mundial de Alemania. Y encima... ¡tienen su propia estrella de hip-hop!
El deseo del presidente Mahmoud Ahmadinejad es purgar a la cultura iraní de la influencia anti-islámica de la "música occidental decadente" y, para ello, necesita a todos los aliados que pueda conseguir. Pero ahora cuenta con el apoyo insólito e inesperado de Kiarash Alimi, un músico adolescente iraní que recurrió al rap para persuadir a sus compatriotas jóvenes de que sus gustos son equivocados.
Ahmadinejad respondió a la disolución de la cultura revolucionaria islámica alguna vez floreciente en Irán prohibiendo canciones de estrellas como George Michael y Eric Clapton en la televisión y la radio estatal. La prohibición afectará a millones de jóvenes iraníes, que siguen ávidamente el progreso de la música occidental.
Alimi, de 19 años, es uno de los artistas más prominentes de Irán y decidió respaldar al presidente ultraconservador de su país atacando el "bombardeo cultural" de Occidente y contraatacando al enemigo a través de uno de sus sonidos más subversivos: el rap.
En su álbum The Guy From Shahrak-e Gharb (El tipo de Shahrak-e Gharb), en referencia a un barrio adinerado del norte de Teherán, ridiculiza a los jóvenes iraníes ricos que esconden su identidad nacional detrás de una fachada de básquet, remeras del Che Guevara y un dialecto callejero basado en el slang típico de los suburbios pobres de Estados Unidos. Con una buena dosis de ironía, la canción hace referencia a la influencia del rapero norteamericano Eminem, que también es un gran éxito en Irán y al que pretende emular, pero en el sentido contrario de su discurso.
"Occidente puede imponernos muchas influencias culturales porque tiene los medios más poderosos del mundo", dice Alimi. "Pero nosotros no podemos exportar nuestra cultura a Estados Unidos, aunque Irán tenga una historia y una cultura que es mucho más antigua. Somos víctimas de un bombardeo cultural".
Con letras que no escatiman desprecio por las pretensiones pseudo-norteamericanas ni insultos, el álbum probablemente no sea lo que Ahmadinejad tenía en mente cuando hizo que el Consejo Revolucionario Cultural Supremo le ordenara a las emisoras regresar a la "música clásica y refinada de Irán".
Este decreto provocó consternación entre muchos músicos que temen un retorno a los días austeros de la revolución islámica cuando prácticamente toda la música estaba prohibida. Pero Alimi dice: "Si el blanco de Ah madinejad es la invasión de una forma de decadencia cultural, tenemos el mismo objetivo".
Comentarios
Publicar un comentario