Hoy leo para empezar la mañana una nota interesante, con tono pseudo-científico-periodístico, que atribuye un efecto de achicamiento o deterioro del volumen cerebral entre quienes consumen alcohol.
La noticia podría considerarse como una campaña contra el negocio de la venta masiva de alcohol;En mi país, el alcohol se vende en todos lados, sin tener en cuenta la edad del comprador en la mayoría de los casos, la ebriedad va de la mano con el record de muertos al volante de automóviles. Ni hablar de la violencia doméstica y/o urbana donde el alcohol también suele estar presente en la sangre de los protagonistas.
Con las drogas las verdades absolutas suelen ser poco creíbles, hace falta tomar prudencial distancia y cotejar información múltiple para acercarnos a su comprensión, y claro, experimentar empíricamente con ellas, también sirve. Sin embargo en el plano de los efectos secundarios del alcohol, la afirmación médica acerca de los "beneficios del alcohol para el corazón", aún no los he logrado experimentar en carne propia y tampoco conozco muchos corazones que agradezcan a la bebida en cada latido, lamentablemente. Mi abuelo bebe pero si bebe sin que le digan "stop" tal vez se nos cae al piso. Mi padre bebe vino pero dice que lo hace por el sabor y no por el efecto depresor del SNC.
La moderación es la clave... o quizá, la abstinencia... cito:
Se sabe que las personas que consumen mucho alcohol tienen un deterioro en el volumen cerebral. Lo que estábamos buscando era un efecto protector en las personas que bebían entre una y siete copas por semana", dijo Paul. "Mi expectativa era que (el alcohol) fuese (protector). Y no resultó ser así", agregó el director del estudio, de la Escuela de Salud Pública de la Boston University.
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